Hay un libro que me inspira mucho, que se llama Un Curso de
Milagros. Este libro dice que es enseñando como aprendes, y no al revés.
Aprendes sobre cuál es tu verdadera naturaleza. Que tu naturaleza es únicamente
el Amor- la única lección que debe ser enseñada.
Pensamos que las otras personas pueden hacernos daño y por
eso las tememos y consciente, o inconscientemente, les atacamos o nos alejamos
por temor. No nos damos cuenta de que lo único que nos daña es lo que nosotros
pensamos sobre ellos. Lo que ellos hacen o dicen, no tiene en realidad, ningún poder
de hacernos pensar nada ni hacernos sentir nada, a menos que nosotros lo
permitamos. Que enorme y maravilloso poder tenemos! Y a menudo, preferimos no
usarlo y culpar a los demás o al mundo de lo que nos ocurre.
Pero a medida que te abres, y vas aprendiendo a ver la
mansedumbre en la mente de los otros, tu propia mente se percibe a sí misma
como inofensiva. Y como tenemos el poder de interpretar y percibir cualquier
cosa como la queramos y la decidamos, podemos hacer esto. ¿Quién decide que
esto está bien o esto está mal? Nosotros. La vida, sin embargo no juzga nada.
La vida se permite incluso ser rechazada a través de por ejemplo, el suicidio.
La vida es completa libertad, completo no – juicio, completa
no resistencia. Por ello es también pura alegría, pura paz y felicidad.
Aprendamos a interpretar con los ojos de la vida. Aprendamos a ser como la
vida.
A veces basta ir sencillamente a contemplar por algunos
momentos la naturaleza, las plantas, los animales…para darnos cuenta de como
todo se desarrolla en ella sin esfuerzo ni resistencia. A veces se nos olvida
que somos parte de ella.
La seguridad no es otra cosa que la completa renuncia al
ataque. Al ver en otras mentes la falta de pecado, te das cuenta de que tu
mente es completamente inofensiva. Ello te lleva a renunciar al ataque. Los que
están completamente a salvo son completamente benévolos, dice un curso de
milagros. Bendicen porque saben que son benditos. Aprendes todo lo que enseñas.
Enseña solamente amor y aprende que el amor es tuyo y que Tú eres Amor.
En mi experiencia, he aprendido a ver en el cabreo del otro
por algo que yo aparentemente le he hecho, todo el amor desde el cual ese
cabreo surge para que yo haga las cosas según lo que esa persona cree en ese
momento que es su verdad y como con ello te está protegiendo y ayudando a su
manera, a través de su cabreo. Eso también es amor.
Aprendamos a ver todo desde el amor, y solo podremos ver
amor por todas partes. No hay nada más de todas maneras. Nuestra interpretación
no puede cambiar lo que ya Es.